Sobrevivir, de eso se trata

Por:Carolina Vázquez

Yo, Simio es una novela sobre la libertad y la aceptación, escrita por Sergio Gómez, escritor chileno nacido en 1962. Trata sobre un simio que vive enjaulado en un zoológico y un día decide escapar de ahí, este tiene que pasar por diferentes situaciones ya que se considera un hombre más.  En el fondo sabe que es un simio, sin embargo es una de las cosas que no acepta hasta después de un tiempo de haber leído y tras diferenciar sus características físicas con los humanos.

Muchas veces en vez de hacer cosas que a nosotros nos gustan, que nos acomodan, que nos divierten, hacemos cosas que les parece bien a los demás, ya que preferimos la aceptación de ellos para que la vida sea as fácil, esto es una de las cosas que se refleja en “yo, simio” como se puede ver en la siguiente cita. “Lo reconozco, deseaba treparme a aquellos árboles y seguir mi vida desde ahí arriba, pero comprendí rápidamente que para adaptarme a mis nuevas condiciones de existencia requería de mi parte estudiar cuidadosamente lo que los demás aceptaban  o acostumbraban. Desde entonces me di cuenta de que una forma de sobrevivir satisfactoriamente era agradar a los demás”. Vivimos tratando de complacer a los demás y agradarles. Le damos mucha importancia a las opiniones ajenas y preferimos de cierta forma vivir satisfaciendo a los otros que a nuestra propia persona. Y en este caso, el simio prefiere gradarle a los demás a que hacer las cosas que al le gusta.

A pesar de que el simio trate de aparentar algo que no es para agradarle a los demás, hay momentos en los que es el mismo a pesar de que lo haga a escondidas para que nadie lo vea, “Al amanecer, cuando nadie me veía, volvía a mi estado natural. Me quitaba la ropa, subía a un árbol y trataba de llegar a la rama más alta”. Siempre va a haber un momento en que no vamos a poder esconder lo que somos o lo que nos gusta hacer y de algún modo trataremos de hacerlo.

En la vida debemos enfrentarnos a cosas nuevas y adaptarnos a ellas para poder encajar de algún modo, como el simio, “Desde el día en que salí de mi prisión en el zoológico, entendí que debía acostumbrarme a todo lo nuevo que viniera. Debía aprender rápidamente, debía sobrevivir, de eso se trataba”. El simio al salir del zoológico, debió enfrentarse a muchas cosas que no estaba acostumbrado, tuvo que buscar diferentes maneras de sobrevivir y poder encajar, en la casa donde trabajaba ya que era donde vivía y más tiempo pasaba.

 En conclusión todos tenemos diferentes formas de sobrevivir ya que de eso se trata la vida, buscar diferentes formas de poder encajar en la sociedad, pero nunca dejando de ser por completo lo que somos, es decir podemos ponernos todos los trajes o mascaras que queramos pero no significa que vamos a dejar de ser lo que realmente somos. A pesar de que el Simio usara trajes formales, seguía siendo el que descubrió a través de libros,  sabia en el fondo que era un simio y que no pertenecía ahí pero tampoco en el zoológico. En el fondo no dejo de ser quien era, simplemente debía adaptarse al lugar en el que estaba.