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lunes, 11 de septiembre de 2017

Por: Florencia Persico

A estas alturas ya todos deberían saber o haber oído hablar del sobrepeso, especialmente en jóvenes. Podemos ver este problema en el libro “36 kilos” de M.B Brozon que, si bien el libro no se centra en la obesidad completamente, es un  tema que está presente en las mentes de las protagonistas Fernanda y Regina, o más bien en Regina ya que demuestra una obsesión por bajar de peso. A pesar de que no estuvieran “obesas” tampoco estaban en buena forma por lo que comienzan una dieta para verse bien antes de su fiesta de graduación. La obsesión de Regina por la dieta obviamente la ayudo a bajar de peso, sin embargo Regina insistía en seguir bajando de peso, cosa que la llevo a la anorexia. Por si no lo saben, la anorexia es un trastorno de conducta alimenticia que supone una pérdida de peso provocada por la persona enferma.
Yendo a mi punto de vista, no suelo preocuparme por estos temas. De hecho, no tengo nada interesante que opinar puesto que no es algo a lo que yo le de mucha atención y/o importancia. Aunque obviamente a uno le importaría si un familiar o algún conocido/amigo tuvieran esta enfermedad y trataría de ayudarlo, pero si fuera mi caso yo no sabría que hacer más que dar “apoyo moral”. Si me preguntaran, no sabría qué decir por dos razones: o no me interesa o me demoro en reaccionar y pensar la pregunta o noticia. Aunque sea cual sea la razón siempre terminaría guardándome mi opinión.
Volviendo al libro, no me acabo por agradar el personaje de Regina; admito que al principio me agradó pero al comenzar la dieta empezó a ponerse “exigente” consigo misma e incluso con Fernanda. A veces decía palabras hirientes (a mi parecer) hacia Fernanda pero la nombrada hacia caso omiso. A medida que la historia se desarrolla se nota un gran cambio en su personalidad por ejemplo, cada vez que Fernanda comenta algo sobre que debe dejar la dieta la mayor parte del tiempo responde con indirectas (o a veces lo dice directamente) sobre el peso de Fernanda, que estaba gorda y demás. Opino que exagera, pero no podría decir que es cien por ciento su culpa, por una parte no lo seria porque gracias a los comentarios de los demás (o más bien por parte del chico que le interesaba) ella comenzó exigirse demasiado con la dieta. Pero si sería su culpa por hacer caso a esos comentarios. Si bien; la dieta comenzó con el propósito de verse bien para la graduación, creo que los comentarios sobre su peso influyeron a que Regina terminara con anorexia. Fernanda por otro lado me agrado, muestra mucha preocupación por su amiga y pese a todos los malos comentarios que ha recibido tratando de ayudar, ella nunca se alejó e insistió en ayudar a su amiga (aunque al principio no creía que ella pudiera tener semejante trastorno).


Al principio, creía que este sería un aburrido libro que leer, pero me arrepiento totalmente. La historia me termino por gustar más de lo que pensé, no hay clichés (al menos yo no he notado ninguno), la historia es original y no muestra una vida “perfecta” si no que creo que intenta ser realista, cosa que a mi punto de vista si logró. Es una recomendable historia que invito a leer a muchos jóvenes ya que repitiendo lo mencionado anteriormente, es un buen libro que si le dedicas tiempo te entretendrás.

1 comentario:

  1. Florencia, encontré muy interesante tu trabajo.
    Estoy de acuerdo con que la obesidad es un tema muy importante, sobretodo en la vida de los jovenes.
    Describiste muy bien los problemas de las protagonistas, y me gustó como conectaste distingas ideas.
    Tuve la misma impresión con respecto a los personajes, y encontré muy bueno que hayas destacado de esa manera la gran preocupación que tuvo Fernanda por su amiga, quien presentó cambios de humor y comentarios hirientes hacia ella. Yo creo que de no ser por Fernanda todo hubiese sido más difícil para Regina.
    En general todo bien, pero faltó un detalle, que en este caso es el titulo, lo que causó que la tesis sea más dificil de entender.

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