Por: Ignacio Van Bebber
Desde hace muchos años que el amor de parejas se ha visto afectado por diversas razones, pero en el libro se presenta un hecho que me llamó mucho la atención, algo que sigue pasando hasta el día de hoy. Muchas veces los padres o la familia pueden afectar directamente una relación, pero en este caso me refiero específicamente a cómo la situación socioeconómica de una persona pueda afectar tanto en una relación. Las personas deciden estar con quienes quieran, por lo que sienten, y si una persona decide estar con alguien es porque tiene sus razones y nadie puede influir en esa decisión ya que es totalmente personal.
En el texto en varias ocasiones Lorenzo Daza (el padre de Fermina Daza) le dice a Florentino Ariza de que no es el hombre ideal para su hija ya que él no tenía estudios tan prestigiosos, además de que trabajaba como telégrafo. Florentino no tenía a diferencia del Doctor Juvenal Urbino estudios, ni mucho menos una carrera tan prestigiosa como la es Medicina, por lo tanto, Lorenzo Daza prefería que su hija se casara con el Doctor antes que con un hombre tan simple. En la siguiente cita se puede apreciar como Lorenzo Daza le dice a Florentino que desapareciera de la vida de Fermina << Así que vine a hacerte una súplica, dijo Lorenzo Daza. Mojó el cabo del tabaco en el anisado, le dio una chupada sin humo, y concluyó con la voz afligida: Apártese de nuestro camino>>(Pág. 123). Lamentablemente es una situación que hasta el día de hoy se da en nuestra época contemporánea y a mi parecer no está bien, ya que las personas son valiosas por lo que son y como son con el resto y no son valiosas por lo que tienen materialmente, una gran persona no necesariamente tiene que ser rica y es algo que la gente no lo ve y se quedan con los estereotipos que la sociedad impone siendo que la gente es tan diversa, creo que hay que primero conocer antes de opinar pero esta sociedad no lo ve así, lo veo como una causa de los principales problemas que existen con respecto a las clases sociales hoy en día.
En la obra se ve claramente en varias ocasiones de cómo la opinión de Lorenzo Daza iba afectando en la decisión de Fermina, fue tanto que Lorenzo Daza incluso se la lleva al “Viaje del olvido” en donde se lleva a Fermina por la fuerza por un tiempo con el fin de que se olvide de Florentino. En la siguiente cita se puede apreciar como el padre de Fermina pelea con Florentino ya que él no pensaba darse por vencido << Entonces Lorenzo Daza se echó hacia atrás en el asiento con los párpados enrojecidos y húmedos, y el ojo izquierdo giró en su órbita y quedó torcido hacia fuera. También bajó la voz. No me fuerce a pegarle un tiro-dijo. Florentino Ariza sintió que las tripas se le llenaron de espuma fría. Pero la voz no le tembló, porque él también se sentía iluminado por el Espíritu Santo. Péguemelo-dijo, con la mano en el pecho. No hay mayor gloria que morir por amor. Lorenzo Daza tuvo que mirarlo de lado, como los loros, para encontrarlo con el ojo torcido. No pronunció las tres palabras, sino que pareció escupirlas sílaba por sílaba: ¡Hi-jo-de-Pu-ta! >> (Pág 124-125) y en la siguiente cita cuando se lleva a Fermina al “Viaje del olvido” << Aquella misma semana se llevó a la hija al viaje del olvido. No le dio explicación alguna, sino que irrumpió en el dormitorio con los bigotes sucios por la cólera revuelta por el tabaco masticado, y le ordenó que hiciera el equipaje. Ella le preguntó para dónde iban y él contestó: “Para la muerte” >> (Pág. 125). Con las citas anteriores se ve reflejado el extremo al que se puede llegar cuando un integrante de la familia no está de acuerdo. Cuando alguien de la familia no está de acuerdo es bastante complicado, pero creo que la decisión cae en la persona finalmente y no tiene que dejarse influenciar, porque nosotros somos los dueños de nuestras vidas, de nuestras decisiones y tenemos que hacer finalmente lo que nos haga feliz. Tomar el timón de nuestras vidas y dirigirlo hacia donde nosotros queramos sin importar lo que digan los demás.
Algo sumamente importante también al momento de tomar una decisión (en este caso de pareja) es el querer que la relación funcione, tener plena confianza y fe en la otra persona independientemente de su estado socioeconómico y el más importante, amar a la persona. Hay que saber separar las cosas, si a una persona le gusta alguien es porque le gusta como es físicamente y psicológicamente, si realmente le gusta, su estado socioeconómico no importa y es lo que la gente desde hace siglos hasta el día de hoy no pueden separar, es la razón del término de millones de relaciones, sin dejar de lado que siempre hay excepciones. Contextualizando con el libro creo que es algo que Fermina nunca logro hacer, pero hay que tener en cuenta que en esa época era muy común la violencia y se podría decir que Fermina estaba “bajo amenaza” por parte de su padre. Fermina se mantuvo en una constante duda que era estar o no estar con Florentino, pero creo que todos los factores influyeron, las cosas que le decían, el estado socioeconómico de Florentino, el Doctor Juvenal por otro lado y finalmente la con mayor peso, la sociedad. En la siguiente cita Fermina rechaza a Florentino cuando regresó de su viaje, síntoma de manipulación por parte de su padre <<Florentino Ariza sonrió, trató de decir algo, trató de seguirla, pero ella la borró de su vida con un gesto de la mano. No por favor-le dijo. Olvídelo.>> (Pág. 153).
Tener la capacidad de poder proyectarse con la otra persona es algo muy importante, si bien siempre van a existir obstáculos en el camino es importante como pareja saber superarlos. Si la familia no está de acuerdo con la relación porque ven que no es “ideal” hay que tener esa capacidad también de poder proyectarse junto a la pareja e ir superando las barreras que pueden ir apareciendo en el camino, poder proyectar un futuro favorable para ambos independientemente de lo que opinen los demás, un futuro favorable en el ámbito social y económico, y para eso tiene que haber realmente ganas y amor, sacar adelante la relación. Fue algo que Fermina y Florentino no pudieron lograr, ellos no pudieron salir adelante con su relación por muchos factores en contra, pero sin dejar de lado que en esa época era mucho más difícil que hoy en día. A mi parecer creo que hoy se encuentran más herramientas para poder salir adelante con una pareja en una situación similar a la de Florentino y Fermina.
En conclusión una persona no necesita ser millonaria o tener grandes estudios para ser una gran persona. Nosotros podemos estar con quienes queremos sin importar lo que los demás digan, las decisiones las tomamos nosotros, somos los dueños de nuestra vida y de nuestras decisiones. Si nos enamoramos de alguien con una situación socioeconómica distinta a la nuestra mientras exista amor todo se puede lograr y para eso es importante tener claras las intenciones con esa persona y poder proyectarse para poder sacar la relación adelante. Nada es imposible mientras se quiera luchar por la causa.
me gusto mucho el tema que elegiste ya que estoy de acuerdo en que ni los padres ni la situación socioeconómica puede afectar en la decisión de estar con alguien o no estar con el.
ResponderEliminarse me hizo muy fácil poder leer esta columna ya que la redacción fue muy buena.
Querido Ignacio, cabe mencionar que el tema que escogiste es muy interesante, ya que, a pesar de identificar a una sociedad antigua, esto sigue ocurriendo en la sociedad moderna, de una manera menor, pero aun así ocurre. Pienso que utilizaste argumentos bastante convincentes y claros que se hacen dificles de contra argumentar, ya que, lo queramos o no, nadie esta libre de sufrir una situación como la planteada en tu columna, y amar es algo propio de nuestra naturaleza, pues, ¿quien no quiere vivir y ser feliz junto a esa persona especial que hace de nuestro mundo uno mejor?. Me parece muy atractivo el punto de vista que sostienes acerca del valor de las personas: "las personas son valiosas por lo que son y como son con el resto y no son valiosas por lo que tienen materialmente", ya que estoy completamente de acuerdo con el hecho de que las personas no somos mejores o peores por lo que tenemos, sino que lo único que hace la diferencia en nosotros es el trato y la manera en que nos relacionamos con los demás. !Felicitaciones por tu gran columna!
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