La horrible indecisión de una mujer.

La horrible indecisión de una mujer

Por: Ignacio Zañartu

¿Quién no se ha complicado alguna vez en el amor? El amor es meramente un sentimiento humano, algo que todos llevamos dentro y que somos capaces de sentir. Pero a veces no todo sale como esperamos.

Este es el caso del libro “Noches blancas”, en el que nuestro protagonista (cuyo nombre nunca es mencionado) en un punto de la historia llega a conocer a una bella mujer llamada Nástenka, él queda perdidamente enamorado de ella, pero no sabe que ese amor le causará un gran dolor.

Nástenka le prohíbe al protagonista que se enamore de ella cuando le dice “no se enamore de mi… tenga por seguro que es imposible el amor entre nosotros” así, haciéndole jurar lo anterior. es más adelante que se nos revela que Nástenka está a la espera de un viejo amor jurado.

Pasa que Nástenka, al ver que su amor parece haberle olvidado a pesar de sus esfuerzos y los de su amigo para hacerle recordar la promesa y que su fiel amigo está perdidamente enamorado de ella, decide quedarse con el amor de su amigo. Desafortunadamente a último minuto, cuando todo parece estar resuelto con el amor viejo y al parecer nunca olvidado viejo amor de Nástenka va a buscarla.

Ella se va con su verdadero amor y abandona al protagonista, agradeciéndole todo lo que hizo por ella con un beso. El protagonista queda horriblemente devastado, pero incapaz de tener resentimientos hacia su amada diciendo “pero, ¡como guardarte rencor por aquella ofensa, Nástenka! ¡cómo arrojar sobre ti una nube oscura que pudiera turbar tu felicidad, plácida y radiante!”

Pero, ¿podemos culpar a Nástenka de su actitud? ¿Y si ella solamente se fue con la persona que amó desde un principio y que realmente siempre amó? Ella se ve terriblemente confundida e indecisa, queriendo estar con ambos pero a la vez solo con uno, tal como ella lo expresa en el relato: “¡dios mío si pudiera quererle a los dos al mismo tiempo! ¡Si el fuera usted!”

La historia transcurre en una Rusia algo más antigua y conservadora, en lo que era mal visto no casarse antes de los 25 porque uno se hacía viejo y estarías solo.

En el caso de la amada, Nástenka, ella es una chica joven de solo 17 años con miedo de vivir junto a su abuela toda su vida, es sumamente inocente y sin experiencia de vida por lo que ella pensó que al ver que su amor no respondía sus cartas se quedaría sola, cosa que la aterraba. Ella, desesperada y confundida, decidió que lo mejor sería quedarse con su amigo y así resolver todo. pero vemos como a último momento, cuando el viejo amor regresa que cambia totalmente de opinión y se va con el abandonando al protagonista y dejándolo como “un gran y amado amigo”

Con todo lo dicho, no podemos decir que Nástenka haya tenido culpa alguna en herir a su amigo y ser tan indecisa, puesto que realmente nunca le amó. Solamente estaba asustada de estar sola, además, ella era joven e ingenua y veía en su fiel amigo un buen “premio de consolación” cuando su corazón siempre estuvo pendiente del hombre que realmente amaba.